Porque considera que la operación de mercados rodantes es de mucha utilidad para la economía familiar, la candidata a la Alcaldía de Apodaca, Myrna Baho de González, prometió erradicar el pago de doble cuotas que los mismos realizan para operar en espacios públicos.
La abanderada del Partido Movimiento Ciudadano, aseguró basar su propuesta atendiendo las quejas expuestas por los oferentes, durante los diversos recorridos que ha realizado en esos establecimientos, quienes aseguran aportar cuotas a la central obrera a que pertenecen y al municipio.
“Vamos a intervenir para que las cuotas que pagan los oferentes no sean tan abusivas, ellos deben pagar una cuota simbólica que no represente gran inversión y que el beneficio de las ventas sea para propio beneficio, no de las centrales obreras, ni mucho menos del municipio que adicionalmente les cobra cuotas por ofrecer sus servicios en la vía pública”, explicó la activista social.
Como parte de su campaña política, Baho de González recorrió esta semana el mercado rodante ubicado en el sector Fresnos, un espacio comercial con una extensión de poco más de un kilómetro, donde operan 400 comerciantes, aproximadamente.
“Los comentarios que nos han expuesto los oferentes es que pagan cuotas de hasta 100 pesos por día, son cuotas excesivas”, comentó, “además, el municipio cobra piso hasta 500 pesos mensuales por permitirles operar en la vía pública, esto me parece un abuso”.
Baho de González explicó que las cuotas que pagan los vendedores a las centrales obreras son ilegales pues existe una reglamento que permite la operación de este tipo de establecimientos, por lo que el único pago a realizar es en la tesorería municipal, de forma personal y no de forma colectiva o con representación de agrupaciones políticas o sindicatos.
La candidata emecista precisó no contar con una cifra exacta de los mercados populares que operan en Apodaca, pero estimó que podrían ser más de 200, algunos de grandes extensiones. Por lo que dijo también que se revisará este aspecto para establecer una probable normalidad y evitar molestias a los ciudadanos.
“También las personas que viven donde operan los mercados se quejan de que obstruyen calles, o de las basura que propician, por lo que esta cuestión debe ser sometida a revisión para establecer un protocolo único de operación y dimensión en este tipo de comercios”.
