El alcalde reelecto Miguel Treviño y sus “asesores” están llevando a San Pedro al rezago, la inseguridad y sobre todo la inestabilidad laboral.

Es difícil entender que una persona que ni siquiera es de este estado que ha trabajado para el sector privado y que además ve la administración como una empresa sea quien toma las decisiones en San Pedro Garza García.

Es una realidad bien conocida por la población sampetrina y sus alrededores que la secretaria de administración publica Laura Lozano Villalobos se ha caracterizado desde un inicio por tomar decisiones arbitrarias y sin tomar en cuenta el bien para los trabajadores que son quienes mantienen al municipio funcionando y son quienes han logrado que San Pedro Garza García estuviera entre los municipios mejor evaluados de Latino América y decimos estuviera porque hoy en día es otra la situación pues por malas acciones del reelecto alcalde Miguel Treviño y su equipo de “asesores” como Laura Lozano están llevando a San Pedro al rezago, la inseguridad y sobre todo la inestabilidad laboral.

En lo laboral afectando a los trabajadores y sus familias pues se han violentado sus derechos laborales sin ningún motivo más que temas políticos y de índole personal porque así maneja Laura Lozano la administración como si fuera su empresa personal.

Para muestra las ocasiones en las que su voto a favor de contratos millonarios para la contratación de servicios profesionales de auditoría y que estos fueran de manera privada y no trasparente para los ciudadanos que pagan impuestos, los tiempos han cambiado y los ciudadanos ya no solo se quedan con lo que los medios tradicionales “informan” buscan más allá, leen investigan y toman la decisión y sobre todo ya no permitirán atropellos a los derechos laborales.

Si el alcalde no cuida a sus empleados que son quienes mantienen funcionando el municipio que será de los que solo son simples ciudadanos que les espera, como dice el dicho el buen juez por su casa empieza, pero parece que el alcalde y su secretaria de administración más bien consideran que el municipio es su empresa y solo le importa tener ganancias a costa de quien sea y por encima de las leyes.

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